Conquest: Spires: Brute Drones
"Golpeó mi caballo... lo golpeó mientras cargaba contra él." - Sir Antonus von Konigstadt
A diferencia de los elegantes procesos y técnicas de Biomancia que se utilizan en el desarrollo de creaciones como los Marksman Clone, los Brute Drones reflejan el insensato desprecio que sienten los Spires por el sufrimiento de sus creaciones. Seleccionados de entre los Force Grown Drones menos imperfectos que emplean como carne de cañón, los Brutes potenciales son transportados y sometidos a un proceso de prueba despiadadamente eficiente, para corroborar si sus cuerpos pueden sobrevivir al estrés de la transformación. Los que no pasan esta prueba, no sirven más que para el reciclaje de biomasa.
Para aquellos que sobreviven, el último paso de este procedimiento invasivo es sellar a los posibles clones en una armadura-carcasa que usarán por el resto de sus vidas, por más corta que sea. Luego se los sumerge, con armadura y todo, en una cubeta con agentes químicos para aumentar su masa ósea y músculos. Junto con los tratamientos de crecimiento hormonal, el resultado es impresionante, aunque limitado. La masa corporal puede triplicarse en tan solo dos meses de inmersión, pero el dolor y el trauma del proceso afectan gravemente las ya limitadas facultades mentales de los drones.
Las enormes armaduras con las que se sumergen pronto se llenan completamente, impidiendo un mayor crecimiento y provocando cada vez más dolor en los incipientes Brutos. Una vez que el dolor es lo suficientemente intenso como para superar los agentes sedantes agregados a la mezcla química, el Bruto se considera completamente desarrollado y se lo saca, antes de que sus violentas sacudidas dañen al resto del lote. El proceso podría ser mucho más compasivo y efectivo, pero el tiempo y la práctica han demostrado que este es el método más eficiente, en cuestión de recursos, para desarrollar estas tropas de choque de primera línea. La altísima tasa de fallas entre los drones de baja categoría está más que compensada por el costo y la supervisión tremendamente reducidos.
Con una altura de más de dos metros (la mayoría de los especímenes llegan a un límite de tres metros), los Brute Drones son una enorme masa de músculo y agresión. La piel, que se esconde debajo de las vendas empapadas de sustancias químicas, es una masa devastada de tejido cicatrizante y depósitos óseos subdérmicos. Su armadura está literalmente pegada a sus cuerpos, y está fijada por cartuchos tratados de forma alquímica que establecen la autoría del Lineage, el número de lote y la fecha de mejora de cada drone en particular.
En el campo de batalla, los Brute Drones son poco más que un ariete vivo. Como resultado, siempre se despliegan junto con un Pheromancer, cuyos poderosos comandos feromonales son lo único que puede atravesar la locura de dolor y rabia que nubla su mente.
Resumen del producto
"Golpeó mi caballo... lo golpeó mientras cargaba contra él." - Sir Antonus von Konigstad...