Totalt: (inkl. moms): 0,00 €
  • −5%
  • El Anillo Único: Ruinas del Reino Perdido
    • El Anillo Único: Ruinas del Reino Perdido
    • El Anillo Único: Ruinas del Reino Perdido
    • El Anillo Único: Ruinas del Reino Perdido
    • El Anillo Único: Ruinas del Reino Perdido

    El Anillo Único: Ruinas del Reino Perdido

    Ref: AU2RUREPERSP
    37,99 €
    39,99 €
    Spara 5%
    Inkl. moms
    ¡Solo queda uno!

    Añadir a favoritos
    En las tierras occidentales de Eriador, entre las Montañas Nubladas y las Montañas de Lune, los hobbits encontraron hombres y elfos. En efecto, todavía moraba allí un resto de los dúnedain, los reyes de los hombres que vinieron por el mar desde Oesternesse; pero iban desapareciendo rápidamente, y la ruina alcanzaba ya a todas las tierras del Reino del Norte. Eriador, las tierras solitarias descritas en El Señor de los Anillos, cobra vida como nunca en este libro para El Anillo Único, el juego de rol oficial basado en las obras de J.R.R. Tolkien. Una región a menudo descrita como desierta se convierte en un crisol de aventuras, ofreciendo muchas horas de juego.

    Capítulo 1: Brumas sobre Eriador. Presenta una descripción de las regiones que en su día formaron parte del reino de Arnor, centrándose en la ciudad de Tharbad.

    Capítulo 2: La tormenta se avecina. Proporciona un conjunto de elementos narrativos al Maestro del saber con el fin de construir un posible futuro para la tierra de Eriador en su conjunto, incluyendo la descripción de muchas amenazas inminentes, personajes del Maestro del saber y sus objetivos.

    Capítulo 3: Localizaciones. Añade doce localizaciones de interés al estilo de los presentados en el libro principal. Estas ubicaciones representan tanto ubicaciones "históricas" mencionadas en El Señor de los Anillos o El Hobbit, como otras que fueron creadas específicamente para el juego.

    Resumen del producto

    En las tierras occidentales de Eriador, entre las Montañas Nubladas y las Montañas de Lune, los hobbits encontraron hombres y elfos. En efecto, todavía moraba allí un resto de los dúnedain, los reyes de los hombres ...