Historia Moderna 65: La expedición a Cochinchina
El gobierno de Leopoldo O’Donnell, deseoso de que España fuese reconocida como gran potencia, se dejó convencer por Francia para sumarse, sin una perspectiva estratégica clara, a la campaña francesa contra Anam. Principió así una ardua empresa en la que los expedicionarios se adentraron en una región de la que poco conocían, surcada por un sinfín de ríos, con selvas frondosas e inmensas extensiones de pantanos y arrozales. La inicial campaña sobre Hué, la capital imperial anamita, fracasó al no lograr los franco-españoles adentrarse en el país desde la bahía de Turón, lo que llevó al jefe del contingente, el francés Rigault de Genouilly, a desviar la atención sobre Saigón, en la provincia meridional de Cochinchina. Allí se concentraron los esfuerzos franceses y donde las tropas españolas, compuestas por aguerridos y resistentes soldados tagalos, demostraron su pericia en la lucha contra las tropas de Tu Duc, en tanto que el gobierno de Madrid, carente de una política clara, y con la abierta oposición del capitán general de Filipinas a la campaña, supeditó su política a la de Francia. A pesar de su magro balance, la expedición franco-española a Cochinchina de 1858 constituye uno de los episodios más sugestivos de la historia de las campañas militares españolas de la época.
Contenido:
- El Imperio annamita y la penetración europea en Asia por Ku Boon Dar (Universiti Sains Malaysia)
- Las motivaciones de la intervención española por Juan Antonio Inarejos Muñoz (CSIC)
- El desembarco y la conquista de Turón por Julio Albi de la Cuesta
- Las fuerzas expedicionarias españolas por Luis Eugenio Togores Sánchez (CEU San Pablo)
- La campaña de Saigón por Julio Albi de la Cuesta
- La expedición vista desde Manila por Jorge Mojarro Romero (Universidad de Santo Tomás de Manila)
- Conclusión y balance de la conquista por Julio Albi de la Cuesta