Desperta Ferro 34. La Guerra de Granada, 1482-1492
El ejército nazarí por Bárbara Boloix (Universidad de Granada). La llamada Guerra de Granada constituyó el escenario en el que el Reino nazarí demostró, por última DF34-2vez en su historia, su debilidad militar ante la Cristiandad peninsular, desembocando en la definitiva desaparición de al-Ándalus. Bárbara Boloix analiza la evolución histórica, organización, formas de combate, armamento e innovaciones técnicas en el ejército del Reino nazarí que se enfrentó a Castilla. Acompaña al artículo una ilustración de Pablo Outeiral donde aparece un jinete gomel, voluntario venido del norte de África para participar en la defensa del Reino nazarí.
El desarrollo de la Guerra, años 1482-1490 por Francisco García Fitz (Universidad de Extremadura). El profesor García Fitz estudia los acontecimientos sucedidos en la guerra de Granada tomando como punto de partida los permanentes conflictos fronterizos entre los siglos XIII y XV. Tras la ruptura de hostilidades en 1482 veremos cómo las primeras incursiones y toma de ciudades por parte del bando cristiano evolucionan hasta una nueva forma de hacer la guerra en la que los Reyes Católicos tendrán un papel central, y que terminará con la definitiva rendición de Granada, último bastión del poder nazarí, ocho años después. Acompaña al artículo una ilustración de Ramón Acedo en la que vemos el momento en que un santón musulmán se presenta en el campamento cristiano que asediaba Málaga y protagoniza un episodio sangriento. Acompaña al artículo un mapa a doble página realizado por Carlos de la Rocha que muestra el avance del frente y los principales acontecimientos bélicos.
Las fortificaciones nazaríes por Antonio Malpica Cuello (Universidad de Granada). La pregunta que nos hacemos es si se pueden considerar castillos las estructuras defensivas que encontramos en al-Ándalus y, especialmente, en el reino de Granada. En el presente artículo el profesor Malpica analiza las fortificaciones como producto de una sociedad concreta. Veremos las características que diferencian a la fortificación nazarí de la castellana, las diferentes concepciones sobre el uso y control del espacio y las adaptaciones técnicas que se afrontan ante la aparición de las armas de fuego. Acompaña el artículo una ilustración a doble hoja realizada por Jorge M. Corada en la que se representa el espectacular asedio de la villa de Setenil, en Cádiz.
El ejército cristiano, una perspectiva institucional por Leandro Martínez Peñas (Universidad Rey Juan Carlos). El ejército cristiano en la Guerra de Granada es, como señaló Miguel Ángel Ladero Quesada, el último gran ejército medieval hispánico, si bien ya en él comienzan a percibirse las transformaciones que, en el lapso de unos pocos años, convertirían a la máquina de guerra de la Monarquía Hispánica en el paradigma de la modernidad militar. Acompaña al artículo una ilustración de ªRu-Mor en la que vemos al caballero castellano Hernán Pérez de Pulgar quien, en el transcurso del asedio de la ciudad de Granada, logra burlar las defensas y alcanza la mezquita mayor, en cuya puerta clava una proclama cristiana.
La artillería en la conquista de Granada por María Dolores Herrero Fernández-DF34-6Quesada (Universidad Complutense de Madrid). Los orígenes de la artillería se encuentran en el medievo asociados al uso de la pólvora y su aplicación a las armas de fuego, e inmersos en la ya imparable carrera tecnológica entre armas ofensivas y defensivas que tendrá su máxima expresión en el Renacimiento. Y, precisamente, tuvo un papel protagonista en la campaña de Granada, revelándose como pieza clave especialmente en las labores de asedio.
El asedio final de la ciudad de Granada (1490-1491) por Rafael G. Peinado Santaella (Universidad de Granada). Después de que el 10 de diciembre de 1489 Muhammad XII al-Zagal (el Valiente), hasta entonces paladín de la resistencia nazarí, DF34-7rindiera a los Reyes Católicos el Levante granadino, su sobrino Muhammad XI, más conocido como Boabdil o “Rey Chico”, enarboló la bandera de la resistencia en la ciudad de Granada, que dominaba desde finales de abril de 1487. Acompañan al artículo una vista aérea de la ciudad de Granada en el s. XV, composición por Rocío Espín, y un mapa de las aproximaciones estratégicas a la ciudad por parte de las tropas cristianas.
Y además, introduciendo el n.º 35: Septimio Severo y los cristianos, por Raúl DF34-8González Salinero (UNED – Madrid). Mientras que en el judaísmo constituía una religión respetada e incluso admirada por las autoridades romanas, la “superstición” cristiana era considerada como una illicita religio. Ahora bien, durante el reinado de Septimio Severo se dio una relación muy peculiar entre la comunidad cristiana y el Estado, que contrasta fuertemente con el tópico asentado en la tradición. El profesor González Salinero nos revela, en este llamativo artículo, en qué consistió esa peculiaridad.